Siempre se reía burlándose un poco, porque decía que corazón es una palabra cursi. Nunca le faltó una sonrisa, acostumbrada decir que sonreír era un disparo al olvido, y siempre citaba a Shakespeare con "No importa en cuantos pedazos se parta tu corazón, el mundo no se detiene para que lo arregles"... en realidad resultó ser que la alegría de sus ojos, era incompatible con su tristeza.

viernes, 10 de febrero de 2012

Después de pasar la noche teorizando acerca del amor tu cuarto se enciende ahora sin mí. Después de una noche entre caricias, risas y algún que otro abrazo. Lo siento, me tengo que ir. Después de empezar el día entreteniéndome con tus fotografías, me dispongo a salir. Después de una tarde entre cenizas de unos sueños hechos trizas. Lo siento, eso no es para mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario