Siempre se reía burlándose un poco, porque decía que corazón es una palabra cursi. Nunca le faltó una sonrisa, acostumbrada decir que sonreír era un disparo al olvido, y siempre citaba a Shakespeare con "No importa en cuantos pedazos se parta tu corazón, el mundo no se detiene para que lo arregles"... en realidad resultó ser que la alegría de sus ojos, era incompatible con su tristeza.

sábado, 4 de febrero de 2012

Si tú quisieras vivir conmigo para siempre. Entonces tú serías diferente del resto de la gente. Si me siento derrotada, tú me haces más fuerte. Y yo que no puedo estar sin ti, no he encontrado la manera de que no tengas que morir. Si te quedas quieto ahí, yo te grabo en mi cabeza cuando no paras de reír.

No hay comentarios:

Publicar un comentario